Cronica de El Lobo De Wall Street
El Lobo de Wall Street está basada en la autobiografía de Jordan Belfort, el auténtico lobo de Wall Street, nadie mejor para plasmar su historia al cine que el gran Martin Scorsese, un director, guionista y productor que siempre busca tocar la fibra sensible del ser humano, en sus películas casi siempre busca entender y reflejar los compartimientos más primitivos y los instintos animales que todos los humanos tienen en mayor o menor medida, ambición, egoísmo, excesos y afán de poder a cualquier precio.
Para entender lo que busca este director, vamos a hablar de algunas películas en las que mostraba los comportamientos más irracionales del ser humano, en Taxi Driver, Robert De niro interpretaba el papel de un hombre solitario, antisocial y paranoico que pretendía crear un mundo mejor a su manera, en Gangs Of New York hablaba de la violencia a la que llega el ser humano por defender su territorio, como los animales salvajes, con la violencia como única ley posible, en Casino, contaba cómo empezó el imperio capitalista de las vegas y desvelaba como se crearon los casinos a base de extorsión y violencia, aunque también hablaba de las dos maneras de trabajar al filo de la ley, por un lado con responsabilidad y por otra con la ley del miedo, en la vida real, muchos seres humanos afortunadamente saben controlar esos instintos animales, otros son presas de esos instintos y son incapaces de controlarlos, otros, como en El Lobo De Wall Street, tienen estos instintos, los controlan “cuando pueden” y para colmo incitan a los demás a dejarse llevar por ellos.
La película en sí, aborda el mundo de las ventas en Wall Street de una manera cómica, sarcástica y exagerada de cómo se comportan los brokers de bolsa y los comerciales sin escrúpulos, te explica como en esta profesión pasas de la riqueza a la pobreza en un momento y del egoísmo más rastrero al compañerismo, también te muestra los trapos sucios de esta gente que se enriquece a costa de los imprudentes que se creen las mentiras de estos lobos, ya que cuando se juntan en manada por un mismo fin, son capaces de devorar todo sin pensar en las consecuencias, gracias a esta historia y a la manera en la que está estructurada, la película engancha desde el principio.
La historia en sí, empieza de esta manera, Jordan Belfort (Leonardo Di Caprio) llega como aprendiz en una gran empresa de Wall Street donde conoce a Mark Hanna (Mathew McConaughey) un excéntrico bróker dueño de una de las empresas más importantes y con más ganancias de Wall Street , el cual le enseña los trucos para alcanzar el éxito, básicamente es pensar únicamente en uno mismo y en sus metas, hablan claro sobre cómo se pierde la conciencia para llegar a ese nivel, con mucha cara dura, valentía y con su medicina, la cocaína, hasta que un día esta empresa quiebra, es a partir de aquí cuando Jordan Belford debe buscar trabajo y vuelve a empezar de cero, recluta a un grupo de freaks que desconocen este mundo y el los enseña a ser como el, entre ellos, se hace muy amigo de Donnie Azoff (Jonah Hill) el cual al ver el coche que tiene se interesa por su trabajo y le convence para trabajar juntos, entre los dos crean una nueva empresa que hace temblar los cimientos de Wall Street y dado su nivel de ganancias, sus extravagantes he irracionales fiestas descontroladas y el aparecer en las portadas de las revistas más relevantes del país, de la noche a la mañana llaman la atención del FBI, además cuando tiene éxito, su amor ya no es su mujer de toda la vida, es el dinero y el poder hacer lo que le dé la gana con él, totalmente descontrolado, se empieza a comportar como un niño caprichoso, es cuando conoce a su gran capricho, su debilidad, Naomi Lapaglia (Margot Robbie) no cuento más, porque hay que verla y que cada uno saque sus propias conclusiones.
Lo mejor de la película: el guion, es una vuelta de tuerca exagerada y con mucho humor del mundo de Wall Street, los diálogos son soberbios y el trabajo de los protagonistas es muy creíble y eficaz (si podéis verla en versión original, mejor) gran trabajo de Di Caprio y Jonah Hill, el ritmo es sencillamente apabullante, directo al grano desde el comienzo de la película hasta el final, dura 3 horas y se te pasan muy rápido, el strees de este trabajo y de este estilo de vida se contagia al verla.
Lo peor de la película: por decir algo, quizás… demasiado exagerada en algunas ocasiones, tanto por el tema de las drogas como del sexo, dado que ya no hay tanta censura en Hollywood, algo bueno, pero quizás hay un término medio, pero claro, los directores tiran por ahí, ya que el morbo vende muchas entradas en taquilla, el ser humano es tan simple que es lo que más busca, las cosas como son, esperemos que la gente no se quede solo con el morbo, porque el mensaje de El Lobo De Wall Street, en el fondo, es mucho más que eso.
Algunos de los invitados al preestreno de El Lobo De Wall Street en el cine Palafox
